Dos semanas después de iniciar el nuevo año, una noticia sacudió a un pueblo de Tailandia luego de que un grupo de habitantes descubriera el 20 de enero el cuerpo sin vida de una criatura a la que catalogaron como “parecida a un extraterrestre”. De inmediato esa información resonó por todos los países del sur de Asia y se volvió tendencia en las redes sociales.
Según notificaron los vecinos de la localidad de Nakhon Si Thammarat, mientras pescaban en los manglares de la ribera del río notaron una figura extraña atrapada entre la vegetación. De inmediato intentaron retirarla y, cuando lo hicieron, su aspecto los dejó estupefactos.
De inmediato avisaron a las autoridades y una escuadrilla se dirigió al lugar. Esta criatura tenía una cabeza alargada con dientes afilados en la boca y su piel podrida parecía brillante.
El medio británico DailyMail replicó esa historia y acercó algunos de los testimonios que presentaron los pescadores al momento del hallazgo. Uno de los que habló fue el cazador Pinij Bansuwan, que dijo: “Estaba colocando mis trampas cuando vi una criatura grande con dientes afilados. Parecía un extraterrestre. Entré en pánico y salí corriendo. Nunca había visto algo así en nuestro río. Nací y crecí aquí”.
Los expertos del Departamento de Recursos Naturales Marinos y Costeros y del Centro de Investigación de Recursos Marinos y Costeros del Bajo Golfo de Tailandia llegaron al pantano y retiraron muestras de la criatura para determinar qué especie biológica era. Además, descartaron la posibilidad de que fuera un alienígena tras el temor de los pobladores.
Debido al cuerpo en descomposición, resultó difícil identificarlo a simple vista y horas después los expertos confirmaron que se trataba de una falsa orca, un tipo de delfín que nada en el mar colindante a Tailandia y que terminó en aquella zona por motivos desconocidos hasta el momento.
Para obtener muestras de la criatura, caminaron y navegaron varios metros. Sustrajeron tejidos del estómago y la cabeza e incluso de otras zonas. Una vez que los resultados del laboratorio dieron por concluido el análisis, el investigador Rattanaporn Phakphian comentó: “Parecía un ejemplar joven. No podemos determinar el sexo debido a la descomposición”. Además, explicó que el mamífero medía cuatro metros de largo y especuló con que pudo acabar allí debido a las mareas altas y los vientos.
“Es posible que esté ahí desde diciembre y quedó atrapado en el bosque de manglares”. En tanto, remarcó que tal vez este delfín “se haya enfermado durante el reciente período de fuertes vientos y mareas altas”. “Antes de ser arrastrado por las corrientes hasta entrar al canal y quedar sin salida en el bosque de manglares donde más tarde murió”, consideró.
Acerca de la causa de su muerte, el científico indicó que no se logró determinar por el estado avanzado de descomposición de los restos. Por último, recalcó que esta especie de delfín integra la lista de animales marinos en peligro de extinción, en particular por la disminución de los ejemplares, la caza, la contaminación y la desaparición de sus hábitats naturales.
Este hecho ocurrido en Tailandia es similar a otros tantos que se notificaron en diferentes partes del mundo, donde en sitios costeros es normal toparse con los restos en descomposición de mamíferos o peces, que no siempre se parecen a su forma original, por lo que las personas alimentan su imaginación y lo asocian a seres de otro mundo o especies no descubiertas. Sin embargo, antes de realizar cualquier acción sobre dichos cuerpos, se sugiere comunicarse a la brevedad con la asistencia policial competente.
